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Muchos de los que vienen a Barcelona marcan como cita obligatoria las grandes joyas de Gaudí, el arquitecto modernista catalán por antonomasia. Sin embargo, para aquellos que no planifican, se encontrarán con colas de hasta 2 horas en las conocidísimas Sagrada Familia y el Park Güell. Si aún quieres disfrutar de la arquitectura de Gaudí, pero sin colas, puedes reservar online con antelación estas dos joyas, o puedes irte a la Colonia Güell, a tan solo 25 minutos del centro de Barcelona.
La Colonia Güell, así como la Torre de Bellesguard, estaban en mi lista de tareas pendientes desde hace un tiempo. Ambas atracciones se han venido potenciando en los últimos meses o años, pero por suerte siguen sin esa masificación que ya forma parte de la marca Barcelona. La excusa para visitarlo fueron las actividades que proponían a los participantes del segundo aniversario de Barcelona Travel Bloggers, entre los que nos incluíamos. ¡No había excusa! Si bien es cierto que Bellesguard resulta decepcionante (al menos las noches musicales), no ocurre lo mismo con la Cripta de Gaudí, toda una joya muy bien organizada.[space_20]
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La Colonia Güel, un contexto histórico en revolución
La Cripta Gaudí, el principal reclamo y por lo que muchos llegan allí. Se trata de la cripta de una iglesia gigantesca que nunca se terminó de construir. Los motivos del cese nunca se llegaron a conocer, aunque se especula que tiene relación con la muerte de Eusebi Güell o con la dedicación de Gaudí a la Sagrada Familia). Pero lo cierto es que esta excusa nos lleva hasta uno de los puntos que mejor puede explicar el contexto histórico de la época y que ha acabando siendo Patrimonio de la Humanidad.
Para hacerlo corto y ponernos en situación, la Colonia Güell nace de la necesidad de la familia Güell de llevarse sus fábricas de textil lejos del centro de una abrupta Barcelona por las revueltas sociales. La estrategia de Güell era crear una colonia industrial y ofrecer alojamiento y servicios a sus empleados. Pero no se quedó solo en eso, sino que generó una comunidad dotada incluso de cultura, ocio y administración para evitar complicaciones a sus empleados. Todo esto se disfrazó como “mejoras sociales”, cuando, analizándolo en frío, no era otra cosa que un control de la plantilla dentro de una supuesta libertad. Nadie te obligaba a irte, pero dejar la colonia “era difícil”.[space_20]
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Cómo llegar a Colonia Güell y la Cripta Gaudí
Llegar hasta la Colonia Güell es muy sencillo. Desde Plaza Espanya se pueden coger las líneas S33, S8 y S4 que te dejan en la estación del mismo nombre. Simplemente recuerda que necesitas un ticket de 2 zonas (3€ el billete sencillo) y si sois varios, os saldrá a cuenta comprar un billete T10 (10 viajes, por 19,60€), ya que lo podéis compartir y a parte permite hacer trasbordo a otros métodos de transporte, mientras que el billete sencillo no. Y una vez en Colonia Güell, solamente tendrás que seguir las huellas azules que han dejado por la acera y que te llevarán hasta el “centro de interpretación”.
El Centro de Interpretación de la Colonia Güell es donde te cobrarán la entrada y te darán toda la información que necesitas para visitar el pueblo sin perderte el resto de joyas modernistas además de la Cripta Gaudí (destacando la escuela de los niños y la casa del gerente de la fabrica). También allí encuentras un museo que explica el sistema de proyección de Gaudí y te entregan el audioguía. Además es el punto de encuentro de las visitas guiadas de los fines de semana (si puedes, te lo recomiendo, y mucho, reserva on-line una de las plazas en la visita guiada). Y si lo haces, que sea tanto para la visita a la Cripta Gaudí como al resto de la Colonia Güell ya que la profesionalidad de los guías es sobresaliente (en total serán 11,50€ o 9,30€ si eres joven, estudiante o jubilado).[space_20]
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Maravilloso sitio para visitar y muy cerca de Barcelona. Probablemente uno de los pocos sitios de Gaudí que se puede visitar tranquilamente, de momento…
Excelente artículo!
Gracias por el comentario! A nosotros nos impresionó que incluso se podían sacar fotos con la iglesia vacía a momentos… Algo imposible e inimaginable en la Sagrada Familia!